Eligió mi voz al otro lado del teléfono. Eligió aguantar mis pesadillas y tragarse mis rayadas. Eligió mi risa escandalosa. Eligió mi piel, mi pelo. Eligió mis ojos. Eligió mis paranoias las noches de invierno. Eligió mis manías. Eligió mis borderías. Eligió mi impaciencia. Eligió mi habitación. Eligió mis sábanas. Eligió mi vida. Eligió su destino (que era yo). Eligió mi todo. Me eligió a mí... PERO YO YA HABÍA ELEGIDO A OTRO, YO YA HABÍA ELEGIDO AL TONTO QUE MÁS TARDE ME JODERÍA LA SONRISA.

Remember me

Recuérdame cuando llegues a casa y sientas que estás vacio. Recuérdame cuando eches de menos los mensajes continuos a las 4 de la mañana. Recuérdame cuando necesites un beso de buenas noches. Recuérdame cuando te entren ganas de darle un abrazo a alguien. Recuérdame cuando necesites un hombro donde llorar. Recuérdame cuando te apetezca reír y no sepas con quién. Recuérdame... y recuérdame como la oportunidad de tu vida, la que dejaste escapar.

Y de repente lo miras... y crees que el planeta tierra a dado un jodido vuelco y se ha puesto patas arriba. Notas como tu sonrisa va aumentando y que tus piernas se disponen a temblar. Sientes como chilla tú corazón por dentro, cómo se desgarra. Los ojos te han empezado a brillar, a brillar de esa manera especial. Parece mentira.. pero estás aterrorizada, estás muerta de amor. Intentas que no se note pero incluso alguien que estuviera a 300 metros de ti, podría notar que estás empezando a morderte las uñas y a tocarte el pelo. Entonces él también te mira y ahí ya si que todos los relojes de todo el puto universo se han parado... Tú cara de tonta aumenta a la vez que él te empieza a sonreír. Estás paralizada, estás fuera de sí. Estás dispuesta a escaparte con él, en este mismo momento... a cualquier parte.

Cuando no sepas si ir o venir. Cuando pierdas toda la confianza en ti. Cuando no quieras hacer otra cosa que encerrarte en tu habitación. Cuando todos los olores de todas las chicas te recuerden al mío. Cuando extrañes el olor de mi pelo. Cuando eches de menos el sonido de mis carcajadas, mi caminar. Cuando creas que has perdido. Cuando estés al borde. Cuando empieces a notar la infelicidad. Cuando no te encuentres... cuando te hayas perdido. ENTONCES, y solo entonces, LLÁMAME... yo estaré ahí para decirte "TE LO DIJE CAMPEÓN"